La mayoría de los accidentes laborales ocurren dentro del horario de trabajo y en el lugar habitual donde se ejecutan las actividades contratadas. Sin embargo, en ocasiones el accidente puede ocurrir durante el trayecto del trabajador, ya sea de ida al trabajo desde su casa o de regreso después de la jornada laboral. En este artículo, te explicaremos en qué casos un accidente durante el recorrido hacia o desde el trabajo se califica como accidente laboral y qué efectos legales conlleva esto.
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Un accidente de trabajo es un suceso repentino que ocurre mientras el trabajador está en desarrollo de sus actividades laborales y que le produce una lesión, ya sea orgánica, funcional o psiquiátrica, y que puede originar a su vez, una incapacidad, la invalidez o incluso el fallecimiento del mismo trabajador.
No obstante, el accidente de trabajo puede darse en otras circunstancias y en lugares y horarios diferentes a los establecidos para la jornada laboral, en los casos que señala la ley, tales como el accidente "in itinere".
Para que un accidente durante el desplazamiento del trabajador hacia o desde su trabajo, sea considerado como laboral, lo que se conoce como accidente “in Itinere”, deben reunirse los siguientes requisitos:
1. Que el traslado sea desde el sitio de residencia del trabajador y hacia el lugar habitual de trabajo o viceversa.
2. Que el empleador sea quien suministre el medio de transporte en el que se desplaza el personal.
En principio, cuando ocurran estos eventos, el sistema de riesgos laborales prestará cobertura para la atención del trabajador accidentado, a través de la ARL a la que este se encuentre afiliado.
El accidente "in itinere" se considera laboral porque se entiende que es un riesgo creado por el empleador al proveer el transporte por medio del cual se desplazará su personal.
Lo primero y más importante, es tener en cuenta que el empleador está obligado a afiliar a sus trabajadores dependientes a una Administradora de Riesgos Laborales (ARL) de elección del empleador, según la clasificación del riesgo previsto para las actividades que desarrollará el trabajador.
En segundo lugar, el trabajador accidentado deberá notificar a su empleador, lo más pronto posible, sobre la ocurrencia del accidente, con el fin de que este último pueda presentar el reporte oportuno a la ARL respectiva. La ARL a su vez, se encargará de calificar el accidente y si se constata que es laboral, pagará las incapacidades, auxilios o pensiones a que haya lugar.
En este punto, es importante advertir que el empleador que no afilie a sus trabajadores al sistema de riesgos laborales, tendrá sanciones legales y además será responsable del pago de las prestaciones sociales que en principio son de cobertura de la ARL, en caso de accidentes laborales de sus trabajadores.
Las ARL's son las entidades encargadas de los reconocimientos económicos a que tiene derecho un trabajador por las incapacidades, pensiones y auxilios provenientes de enfermedades y accidentes laborales, así:
Recuerda que el presente artículo contiene temas de carácter general y no constituye asesoría legal. Si requieres mayor orientación para resolver una situación jurídica de tipo laboral o en materia de seguridad social y necesitas un abogado experto en el asunto, aquí podemos conectarte con profesionales del derecho confiables, con gran experiencia y bajo tarifas justas. Contáctanos a través de nuestro formulario virtual.