La mediación familiar es un tema relativamente nuevo en Colombia, ya que a pesar de estar considerado como uno de los métodos alternativos de resolución de conflictos, generalmente su funcionalidad se pierde en el Derecho Penal o en el Derecho de Familia, por esta razón, en este articulo abordaremos las generalidades de las mediaciones.
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Como dijimos anteriormente, la mediación familiar es visto como uno de los métodos auto compositivos, donde por medio de un mediador o facilitador, se busca que en la familia mejore la comunicación y las relaciones interpersonales. Es importante tener claro que al hablar de familias pueden ser personas casadas o que vivan en unión marital de hecho.
Los temas que se pueden en las mediaciones familiares son los de separación de bienes, responsabilidad paternal, alimentos, visitas, custodia, conflictos de pareja, entre otros.
El proceso de la mediación familiar lo puede solicitar ante una Comisaría de Familia o ante cualquier centro de mediación y conciliación.
Las audiencias de las mediaciones pueden durar de una a dos horas dependiendo del tramite a mediar, pues debes recordar que el mediador buscará la manera más acertada que se restablezcan las relaciones de pareja y en general de la familia, por lo que en algunos casos será necesario realizar un seguimiento, donde se puedan evidenciar los avances del proceso y el cumplimiento de lo pactado.
Lo primero que deberás hacer es acercarte como dijimos en un principio a la Comisaria de Familia o centro de conciliación y mediación mas cercana, lugar en el cual expondrás tu caso para ser orientado por un profesional en el tema y quien te entregará una citación para que tanto tú como los miembros involucrados en la controversia puedan comparecer.
Recuerda que la voluntariedad es uno de los principios rectores en el tema de mediación por lo que el acudir a esta instancia deberá hacerse en forma voluntaria, además de esto, no estás obligado a acudir ni a firmar nada de lo pactado si este no es tu deseo o no te encuentras de acuerdo.
Luego de la citación, y en el día de la audiencia, se le concederá el uso de la palabra en primera instancia al citante para que ponga en contexto de los hechos a las demás partes y al mediador, luego a cada uno de los citados para que tengan la oportunidad de controvertir lo dicho por el citante o se adhieran a lo manifestado por el mismo.
Por último, está la etapa de la conciliación o mediación, donde las partes se comprometerán a mejorar los ambientes familiares y si es necesario se comprometerán a asistir a un proceso terapéutico con el fin de obtener herramientas para manejar un lenguaje asertivo.
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